VI Domingo de Pascua -C-


Juan 14, 23-29

Jesús le contestó: El que me ama, se mantendrá fiel a mis palabras. Mi Padre lo amará, y mi Padre y yo vendremos a él y viviremos en él. Por el contrario, el que no guarda mis palabras, es que no me ama. Y las palabras que escucháis no son mías, sino del Padre, que me envió.
Os he dicho todo esto mientras estoy con vosotros; pero el Paráclito, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, hará que recordéis lo que yo os he enseñado y os lo explicará todo.
Os dejo la paz, os doy mi propia paz. Una paz que el mundo no os puede dar. No os inquietéis ni tengáis miedo.
Ya habéis oído lo que dije: «Me voy, pero volveré a vosotros». Si de verdad me amáis, deberíais alegraros de que me vaya al Padre, porque el Padre es mayor que yo. Os lo he dicho antes de que suceda, para que cuando suceda creáis.


"Para poder amar a Dios debemos purificar el corazón. Pensad en un árbol que tuviera sus raíces en el corazón; de ningún otro lugar proceden las acciones sino de la raíz del corazón. Si has plantado en él el egoismo, brotarán espinas; si, en cambio, has plantado amor, brotarán frutos de amor". San Agustín

Descargar powerpoint.

09 de mayo de 2010

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Déjanos tu comentario o solicitud de oración.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...
ip-location